Huella de carbono: ¿qué es y cómo se mide? Te lo explicamos
Detener el cambio climático es posible gracias al trabajo de todos. Por ello, en abbi te queremos hablar sobre la importancia de la huella de carbono en esta tarea y en qué consiste. ¡Aprende a utilizarla!
¿Qué es la huella de carbono?
Se trata de un indicador ambiental que permite cuantificar el volumen total de gases de efecto invernadero (GEI) que producen las actividades económicas y cotidianas del ser humano.
La huella de carbono mide tanto las emisiones directas como indirectas de compuestos como el metano (CH4), el óxido de nitrógeno (N20), los hidrofluorocarburos (HFCs), los perfluorocarbonos (PFCs), el hexafluoruro de azufre (SF6) y el dióxido de carbono (C02).
Se mide en masa de CO2 equivalente y se expresa en unidades de carbono equivalente (C02eq). La estrategia de gestión de emisiones que se aplique, dependerá del tamaño de la huella.
En definitiva, la huella carbono no es más que el impacto que deja nuestra actividad en el planeta.
Calcular la huella de carbono de una organización
El cálculo de huella de carbono de empresas varía en comparación con el que se realiza para cuantificar la huella personal, ya que tiene en cuenta tres tipos diferentes de emisiones durante un período predeterminado.
Este análisis se realiza siguiendo los estándares internacionales como el GHG Protocolo y la norma ISO 14064-1.2.
Emisiones directas
Son los gases procedentes de combustibles de edificios, de maquinarias, de vehículos, de equipos de refrigeración o por reacciones químicas durante los procesos productivos de la organización.
Emisiones indirectas
Son los gases de efecto invernadero emitidos por el productor de la energía que requiere la empresa en su operación. Se tiene en cuenta tanto la cantidad de energía requerida como su origen.
Otras emisiones indirectas
Están asociadas a los productos y servicios adquiridos por la empresa. Los viajes de transporte externos, encargos subcontratados de limpieza, seguridad o gestión de residuos, son algunos ejemplos.
¿Cómo reducir la huella de carbono?
Son muchas las formas de reducir la huella de carbono, pero la clave está en bajar la compra de productos, reutilizar y reciclar. Se recomienda:
- Incrementar el uso del transporte público, de la bicicleta o andar más a pie.
- Comprar vehículos más respetuosos con el medio ambiente.
- Utilizar en casa energía renovable.
- Adquirir electrodomésticos de bajo consumo energético.
- Tomar conciencia sobre nuestra propia huella de carbono y vivir de forma que nuestras acciones no perjudiquen al planeta.
El gas natural como aliado para reducir tu huella de carbono
Una de las energías más limpias que existen es el gas natural. Su extracción, generación, transporte y uso tiene un efecto medioambiental menor que el suministro eléctrico.
La huella de carbono del gas natural es menor que la de otras energías convencionales, porque su combustión reduce entre un 20% y un 30% las emisiones de dióxido de carbono (CO2).
En abbi, como Sociedad de Beneficio e Interés Colectivo apelamos al consumo de energías que beneficien al medio ambiente, además de ayudarte con todos los servicios asociados al gas natural.